Las
naciones se hacen grandes cuando son capaces de integrar principios, valores,
aspiraciones, sentimientos e intereses de sus ciudadanos
Los
venezolanos defendemos la libertad y la democracia
La
fortaleza de la democracia chilena se expresó de manera contundente el pasado 4 de septiembre al manifestar
mayoritariamente su voluntad en las urnas electorales su rechazo a la propuesta
de nuevo Pacto Social, expresado en un proyecto Constitucional, sometido a su
consideración, al no satisfacer las aspiraciones de las mayorías chilenas,
dando así un mensaje y reafirmando el principio claro e inequívoco al mundo y a
la dirigencia política, de que son los
ciudadanos, la esencia de la democracia, y como tal, factor fundamental
para los grandes cambios, posicionamiento y avance de las naciones. En ese
sentido, La Alianza Nacional Constituyente Originaria ANCO felicita
efusivamente a la hermana nación Chilena, su ejemplo, que fortalece a los
venezolanos en nuestro innato propósito de rescatar la libertad y la democracia
a las que queremos y valoramos, poniendo fin a la ignominia de un régimen tiránico
que destroza nuestra nacionalidad, la República, al país, que practica la
violación continuada de los Derechos Humanos y políticos como una política de estado, genera la mayor crisis humanitaria
del continente, además de la huida de 7,2 millones de compatriotas -25% de la
población-, la más alta en el mundo. En razón de lo anterior expresamos:
1.- ANCO
reitera a los venezolanos y a la dirigencia en general, retomar el supremo
legado de libertad heredado de nuestros libertadores. Solo unidos y teniendo como
fin agotar sin pausa nuestros mayores
esfuerzos para liberar nuestra patria Venezuela,
su bravo y generoso pueblo, su libertad, su soberanía y su auténtica democracia
por sobre cualquier consideración o aspiración por legitima que sea. No es el
momento de parcialidades o individualismos, es el momento de la nación y todos
lo lograremos;
2.- Basta ya a la
desnaturalización de los principios, la adopción de antivalores, la destrucción
de lo bueno y genuino de la venezolanidad, la subversión de la palabra y el
lenguaje, la abdicación de la existencia como condición para no ser perseguido
por “el Estado” que han minado el proceso político venezolano. Frente a ello,
la rebeldía de un país, el apoyo decidido de la comunidad internacional, y la
comprensión de que los principios y valores que atesora la condición humana
deben ser defendidos bajo esfuerzo común y global, han impedido la
consolidación definitiva del diabólico esquema de “la revolución socialista del
siglo 21”. En medio de todo esto, se ubica una dirigencia opositora con muy
escasa lucidez y exigua capacidad para interpretar la realidad, navegando en
aguas que conducen a la misma parte o a ninguna parte, ignorando el agónico drama
existencial de cada venezolano, drama que, al hacerse uno solo, emergerá como
lava volcánica buscando su propio camino, su redención;
3.- ANCO reitera y propone que la solución a la
grave crisis se debe iniciar por una propuesta que nos aglutine a todos en
torno a ella, una solución radical que vaya al fondo de la grave crisis
económica, política y social, siendo la más adecuada y oportuna, la propuesta
por la Iglesia Católica venezolana de Refundar la Nación, en su
propósito de acompañar al pueblo en resguardo y defensa de su dignidad, principios
y valores perdidos, dando cabida a nuevos paradigmas de participación ciudadana
en un Estado moderno, donde el mismo, junto a sus instituciones, esté al
servicio del hombre como sujeto de su desarrollo integral, colectividad y de su
ámbito político territorial, y no al contrario. Esta propuesta exige a todos,
en un país desinstitucionalizado donde se viola la constitución y las leyes, acudir
a nuestros poderes creadores y tradición republicana para refundar la república,
mediante un proceso constituyente de carácter originario, es decir, convocado
por el pueblo, que a su vez establezca una transición representativa de la nación,
que promueva en condiciones de sana convivencia la convocatoria a elecciones
libres y confiables, con apoyo efectivo y supervisión de la Comunidad
Internacional. (Artículos 1, 5, 333, 347 CRBV);
4.- Los recientes eventos en Chile, contrasta con la
experiencia constituyente venezolana de las últimas décadas. En efecto, la
experiencia constituyente de 1999, enmarcada en una victoria electoral (1998),
bajo un sistema electoral que desconoció la representación de las minorías (el
40% de los votos obtuvo el 4% de los escaños), se instaló para “refundar la república”,
incorporando principios que vulneraron la separación de poderes, la alternancia
en el poder, las libertades ciudadanas y el respeto a los derechos humanos. De
peor manera, el espurio proceso constituyente iniciado en 2017 y finalizado en
diciembre de 2020 -que no refundó la república ni dictó una nueva
constitución-, tuvo como marco la decisión de un gobierno -paupérrimo en
legitimidad- de convertirse en un régimen totalitario, forajido, abyecto,
criminal, dispuesto a romper cadenas que le ataban (OEA-Carta Democrática),
ávido de riqueza mal habida, aliado de las perversiones globales que de peor
manera amenazan al hombre de hoy y, también, al del mañana;
5.- ANCO llama la atención a los sectores
políticos en el sentido de que es irresponsable propiciar otra frustración a
los venezolanos participando en un proceso electoral convocado por un CNE
ilegitimo, para celebrar elecciones inciertas de realizarse en el 2024, donde
el régimen actuará fraudulentamente una vez más para reelegirse y legitimarse ante
el mundo, acarreando la perdida indefinida de la República. Acoger el proceso
de Refundación de la nación nos permite apartar la usurpación como una consecuencia directa del proceso Constituyente
y se lograría en menor tiempo al del supuesto proceso electoral que termina en
el 2025 con la toma del poder por el nuevo Presidente;
6.- Un proceso de refundación constituyente que
defina un nuevo Pacto Social, debe ser expresión autentica de la aspiración y
voluntad legitima de los ciudadanos, donde nos sintamos representados todos, no
impuesto, desprovisto del sectarismo de las tendencias ideológicas o de control del Estado
por intereses partidistas o particulares, es garantía del fortalecimiento y cohesión
del cuerpo social necesario para acometer los grandes cambios que el país
requiere, de allí que todas las tendencias partidistas o no, deben paritaria y
proporcionalmente estar representadas en la Asamblea Constituyente.
7.- ANCO exige poner de lado la mezquindad, el
sectarismo e insana incomprensión de
quienes hasta ahora se abrogan su representación que ha impedido poner de
manifiesto la grandeza de nuestro heroico pueblo, que dentro y fuera del país
transita el calvario de la opresión y desarraigo forzado de su patria,
privándolo de su libertad. A la vez exhortamos a la Comunidad Internacional
atender y debatir propuestas distintas y legitimas no inscritas en la agenda
impulsada por el régimen y factores politicos de lamentable trayectoria
errática en la solución a la crisis, evidenciado en 26 elecciones y 14 diálogos
o negociaciaciones con temas convenidos entre las partes, ignorando la voluntad
nacional, como sucediera con las Consultas Populares vinculantes del 2017 y
2020, no acatando sus mandatos por quienes están llamados a hacerlo como supuestos
representantes del pueblo soberano;
8.- ANCO,
al insistir en que los venezolanos transitemos un proceso Constituyente, pretendemos
que este evento surja desde nuestra condición ciudadana, sabiéndonos titulares
de nuestros poderes creadores, ejerciendo nuestra capacidad de auto determinar
nuestro destino, avanzando con paso seguro en una conducción colectiva, entre
todos, con principios y valores que reconozcamos y valoremos, que hagan honor a
lo mejor de nuestras luchas, que nos permitan ver con esperanza y orgullo el
horizonte, trabajar duro y esperar sin miedo ni sobresaltos el futuro.
¡QUE EL PUEBLO DECIDA!
“En una palabra, mi querido general, yo no conozco más partido de salud,
que el de devolver al pueblo su soberanía primitiva para que rehaga su pacto
social. Vd. dirá que esto no es legítimo: y yo, a la verdad, no entiendo qué
delito se comete en ocurrir a la fuente de las leyes para que remedie un mal
que es del pueblo y que sólo el pueblo conoce. Digo francamente que si esto no
es legítimo, será necesario a lo menos, y, por lo mismo, superior a toda ley:
pero más que todo es eminentemente popular, y, por lo mismo, muy propio de una
república eminentemente democrática.”
Simón Bolívar
Carta
dirigida a Santander, octubre de 1826
Alianza Nacional Constituyente
Originaria ANCO
Caracas, 6 de septiembre de 2022
1 Comentarios
Excelente, respaldo pleno a la propuesta de ANCO.
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